Homero agradecerá estar en lugares con mucha luz. Si bien no le gusta el sol directo durante todo el día, no le vende mal un lugar que este expuesto al sol directo algunas horas al día.
Riega a Homero moderadamente durante el invierno, estará bien con una vez cada diez días en esta época. En el verano deberá aumentar la frecuencia a dos veces por semana aproximadamente.
Homero no es muy exigente en cuanto a las temperaturas. Sin embargo, ten cuidado con las heladas si lo tienes en tu balcón o terraza, si este tiene techo no habrá problema. Una ves acostumbrado al lugar donde lo pongas no pedirá mas que sus cuidados básicos explicados anteriormente.